Toda acción de Tori provoca una reacción de resistencia (oposición) defensiva o contraataque, es como si su cuerpo dijera: He descubierto tu intención, sé lo que quieres hacer pero no me dejaré.
Todo diálogo corporal entre Uke y Tori se basa en imponer las intenciones de uno sobre el otro: Uke de manera directa por la fuerza, y Tori sin oponerse, buscando la concordancia de movimientos, siempre con la idea de disipar la oposición y la dualidad del enfrentamiento.
Ejercitarse en este diálogo corporal Aiki, requiere:
- Eliminar toda rigidez muscular y mantener un tono distendido.
- Respiración acompasada a los movimientos.
- Mantener una buena postura en todo movimiento (verticalidad).
- Estar presente en el presente.
- Actuar con la idea de hacer fluir nuestra energía no contra el otro, sino en armonía con él.
- Disponibilidad inmediata y permanente.