4º Dan de
Aikido.
Doctor en
Derecho.
Profesor
Titular de la Universidad de Zaragoza.
¿Por qué
practicas Aikido?
No tiene
porqué haber una razón para hacer lo que te gusta, o quizá sea únicamente por
éso, porque me gusta. Desde luego, la
práctica del Aikido aporta beneficios como la actividad física moderada que lo
hace accesible a todos, coordinación y percepción psicomotriz, adaptabilidad,
serenidad emocional, afán de superación, etc.
Pero hay que insistir en que es mejor practicar Aikido sin buscar nada
en concreto y sin aferrarse a objetivos a corto plazo, y los beneficios surgen
por añadidura y de forma natural.
¿Cuántos años
de entrenamiento acumulas en tu carnet Aiki?
Empecé la
práctica del Aikido con 17 años, aunque con periodos de larga interrupción por
motivos de trabajo, pero son ya más de 30 años, y lo sorprendente y a la vez
estupendo es que todavía me queda mucho por descubrir y aprender.
¿Cómo ves el
Aikido desde el punto de vista de un Doctor en Derecho del siglo XXI?
Dijo Kigoro
KANO que el Aikido es un Budo ideal:
Además de sus beneficios físicos y psíquicos, y desde una perspectiva
estrictamente legal, el Aikido proporciona medios para gestionar la defensa
personal atendiendo a los dos objetivos que la legislación vigente impone y
cuya compatibilidad no siempre resulta fácil: eficacia, para preservar la
seguridad e integridad física del defensor, y proporcionalidad, para no
infligir al agresor lesiones de gravedad, so pena de tener que afrontar
sanciones legales, incluso penales. Pues
bien, el Aikido incluye en su aprendizaje los hábitos tendentes a una actitud
comedida frente a una agresión, que haga de la proporcionalidad parte del
trabajo cotidiano, en una actitud de impedir herir sin herir acorde, no sólo
con los principios y valores del Budo, sino también con el Derecho.
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